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ISMAEL RIVERA

ISMAEL RIVERA

Biography

Ismael Rivera (San Mateo de Cangrejos, Santurce, Puerto Rico, 5 de octubre de 1931 – 13 de mayo de 1987), simplemente conocido como por el apodo de “Maelo”, “el Sonero Mayor de Puerto Rico” y también como “el Brujo de Borinquen” fue un cantante puertorriqueño de música popular. En los años setenta formó parte de la Fania All Stars. De sus temas más populares se recuerda Las Caras Lindas, escrito por Tite Curet Alonso y “El Nazareno”, tema que habla de los peregrinajes que hizo entre desde 1975 a 1985 a la procesión del Cristo Negro de Portobelo, Panamá.

Ismael Rivera nació el 5 octubre de 1931 en Santurce, Puerto Rico. Fue el primer hijo del matrimonio compuesto por Margarita Rivera García, ama de casa, y Luis Rivera Esquilíne, carpintero ebanista. A Ismael le siguieron cuatro hermanos: Diego, Laura, Ivelisse y Tommy. De niño se distinguió por un apasionado interés en la música y se las pasaba improvisando con latas y palitos. A temprana edad debió abandonar sus estudios para trabajar como limpiabotas y así contribuir con el sostén del hogar. A los 16 años se inició como albañil, aunque se la pasaba cantando y tocando en los rumbones que se formaban en la Calle Calma y otros sectores del Santurce Cangrejero, en unión de su amigo y compadre Rafael Cortijo.

La primera vez que se juntaron para tocar Ismael y Cortijo fue en 1948, en el Conjunto Monterrey, dirigido por Monchito Muley, Maelo como conguero y Cortijo como bongocero. Pese a su interés en cantar, nunca le dieron la oportunidad. Un día, mientras Cortijo tocaba en La Riviera, en La Marina sanjuanera, llegó el entonces albañil a pedirle trabajo y fue contratado por un sueldo de $32.80 semanales, por debajo de los $55.00 que ganaba tirando mezcla fina.

En 1952 Ismael Rivera debió dejarlo todo para formar parte del ejército de Estados Unidos, pero fue licenciado por su deficiencia en inglés. A su regreso a la Isla, Cortijo le consiguió trabajo con la Orquesta Panamericana de Lito Peña, con quien grabó y pegó los éxitos “El charlatán”, “La vieja en camisa” y “La sazón de abuela”. Con “El charlatán” se dio a conocer en todos los rincones de la Isla, y posteriormente consiguió la fama internacional. Entre presentación y presentación, Maelo salía de El Escambrón y se iba a descargar con su amigo Rafael Cortijo en el Black Magic de Miramar. Un incidente de faldas precipitó su salida de la Orquesta Panamericana y Lito le pidió que no cantara ese día en el programa radial de la orquesta. Pero Ismael Rivera decidió no cantar con la orquesta ése ni el resto de sus días.

En 1954 Ismael Rivera se integra al grupo de Rafael Cortijo, con quien grabaría 17 discos. Con el Combo de Cortijo fue vocalista de gran cantidad de populares temas como “El bombón de Elena”, de don Rafael Cepeda, así como “El negro bembón”, “Juan José”, “Besitos de coco”, “Palo que tú me das”, “Quítate de la vía Perico”, “Oriza”, “El chivo de la campana”, “Maquinolandera”, “El yoyo”, “María Teresa” y “Yo soy del campo”, entre otros. Fue la orquesta fija de la popular “La Taberna India” y reclamada por hoteles de lujo y grandes centros de baile de la época, entre ellos el Palladium Ball Room. En 1957 formó parte de una tremenda “guerrilla” que tocaba en televisión, que incluía a Rafael Hernández en la guitarra, Luisito Benjamín al piano, Lito Peña en el clarinete e Ismael en las maracas.

A finales de los 50, la bomba y plena logran introducirse en los más reclamados salones de baile, gracias al combo de Cortijo y su cantante Ismael.

A Ismael Rivera se le llamó sonero mayor, por el productor cubano Ángel Maceda, dueño del club Bronx Casino en Nueva York; lo anterior se basa en una entrevista realizada al mismo Ismael Rivera.[cita requerida] En Nueva York, la colonia latinoamericana escuchaba y bailaba su música porque les recordaba quiénes eran, mientras a los boricuas residentes en la urbe los hacía sentirse de regreso a su patria. Durante esos años la banda alternó con las grandes orquestas que deleitaban a los baliadores en el famoso Palladium Ball Room, entre éstas la de Tito Rodríguez (gran influencia en su música), Tito Puente y Pérez Prado.

En 1959, Ismael Rivera participó junto al Cortijo y su Combo en la película “Calipso”, una producción italo-francesa dirigida por Franco Rossi, con Harry Belafonte de protagonista.

En marzo de 1962, Maelo es separado de la sociedad y enviado a cumplir una sentencia de cuatro años en el programa carcelario de rehabilitación en Lexington, Kentucky, Un compatriota suyo, Bobby Capó, sintió como propio el encierro de Ismael Rivera , y le compuso un número que llegaría a convertirse en himno de los reclusos: “Las Tumbas”, inspirada en la prisión de Kentucky que tenía varias pisos bajo tierra.

Al salir de la cárcel, mientras su compadre Cortijo reintegra a varios de sus músicos en su “Bonche”, Maelo adelantó música con el percusionista Kako, Tito Puente y su propia orquesta, Los Cachimbos, para tocar lo que realmente quería, lo que le gustaba. Desde la gran manzana, Maelo y los Cachimbos impactactaron el panorama musical con sus grabaciones “La controversia” y “La soledad”, y posteriormente “Mi negrita me espera” y “Dime por qué”, dos clásicos de la salsa. Curiosamente, los salones de salsa en Cali cierran con “Mi negrita me espera”, todos la cantan a coro sin bailarla. Otros éxitos con Los Cachimbos fueron El Jaragual,”San Miguel Arcángel”, “La gata montesa”, “La manía de tu mujer”, “Maña, Maña” y el bolero de serenata “Hasta Mañana”.

Con Kako y su trabuco grabó “Lo último en la avenida”. También grabó con la Fania All-Stars cuando sus dueños Jerry Masucci y Johnny Pacheco compraron el sello Tico Alegre y lograron capturar a una serie de músicos rebeldes. En 1979 Ismael Rivera fue el artista mejor pagado por esa casa disquera, solo superado por Celia Cruz. Entre los éxitos con la Fania se destacan la versión de “El Nazareno” con Papo Lucca al piano, y “Cúcala”, a dúo con Celia Cruz.

No obstante su papel destacado como cantante y sonero, Ismael fu un importante compositor. De él son los temas “Besito de coco”, “Aquí estoy, ya yo llegué”, “Arrecotín arrecotán”, “El que no sufre no vive”, “Siete pies bajo la tierra” y “La cumbita”, entre otros.

En agosto de 1974 hubo un histórico reencuentro en el Coliseo Roberto Clemente, entre Cortijo e Ismael y los ex integrantes de su banda, dirigidos entonces por Rafael Ithier bajo el nombre de El Gran Combo. En este evento se interpretaron temas como “Ellos se juntan”, de Kito Vélez y Sammy Ayala; una nueva versión de “Perico”, de Juan Hernández; “Perfume de rosa”, de Rafael Ortiz; “El negro bembón”, de Bobby Capó; y “Maquinolandera”, de Margarita Rivera, Doña Margó.

La muerte de su compadre Rafael Cortijo el día de su cumpleaños lo afectó, al extremo de perder la voz, pese a que atesoraba la esperanza de recuperarla para cantar en un homenaje que le preparaban los familiares y amigos de Cortijo en el Coliseo Roberto Clemente. Pocos días antes del evento, El 13 de mayo de 1987 a los 55 años de edad mientras descansaba en su casa en la calle Calma de Villa Palmera, en compañía de su madre y de su hijo, a las 5:33 de la tarde fallece como consecuencia de un infarto.